miércoles, 21 de mayo de 2014

Sigamos

"El temor esta vez.
Esta vez elegí quedarme con la calma.
Porque siempre nos va a invadir la inseguridad en el último minuto. Siempre vamos a sentir que nos habría venido bien más tiempo. Siempre nos van a torturar esos fantasmas la noche previa a grandes eventos. Pero hoy elijo no ceder. Elijo neutralizar un poco mi querida neurosis y quedarme donde estoy. Las horas van a pasar igual y la mente tiene caminos desconocidos, pero llegar es posible. Debe ser posible. 
(...) No es un cambio de paradigma, simplemente es un pequeño ajuste. La historia (o mejor dicho, la mañana) me juzgará. De cualquier manera, pasarse al lado del equilibrio siempre es una buena inversión."

Así empezaba una nota que escribí antes de rendir un final... Extraña calma. 
Esta vez sin embargo no es exactamente calma lo que me envuelve. Me siento como en una nube de neblina. No es seguridad, inseguridad tampoco, contra eso luché constantemente y con todas mis fuerzas hasta hace muy poco. Conformismo? No. Cansancio? ... Puede ser. No es agotamiento mental real, pero en lo que va del año (incluso desde el mismísimo momento en que eomezó el año) estuve bajo el efecto de muchas fuerzas que tironearon de mi mente en todas las direcciones. De mi cuerpo un poco también. No tuve tiempo de pensar, y a veces tuve demasiado tiempo. Qué concepto el "no tener tiempo". 

El temo esta vez es distinto. Lo interesante es que la pseudocalma que me ahoga ahora apareció cuando imaginé la situación a venir como una muy similar a una ya vivida. Cosas que se hacen todo el tiempo y nunca tuve un resultado tan efectivo, de calma casi instantánea.

Estoy cansada, no sé bien lo que digo. No sé bien lo que siento.
Me quedan fuerzas porque me tienen que quedar. Porque dejarme caer no está en mis permitidos, ya no más. 
Dos fuerzas opuestas, ambas con sus razones justificadas, tiran de mí desde hace meses y estoy constantemente a punto de rasgarme en dos.
Quiero decir "quién sabe" pero sé, muy a mi pesar, que depende exclusivamente de mí superar esta nueva ola de cansancio una vez más. Superar esta y todas las que vengan. Sé que puedo. El tema de si quiero está siento discutido, pero debo apelar a mi carta de siempre de no parar a pe sar estas cosas a mitad de camino. 
Así que adelante. Incluso cuando no sienta esa energía ue aparece tras mini espisodios de inspiración. Incluso si sigo cansada, aún más hoy que ayer. Incluso si me aburro. Incluso si me siento débil. 


"-Estás cansada?
-Sí
-Sigamos."