domingo, 6 de julio de 2014

Injusticias modernas.



-¿Qué hiciste para merecerlo?
-Existo. Y por ello, el mundo me lo debe.

Los pueblos más primitivos no creían que la naturaleza existía para abastecer al hombre. No nacían esperando la lluvia. Eran uno más con el resto de las almas del bosque, unos cuantos pasos más abajo que la fuerza cósmica. Existir sólo significaba estar presente y no garantizaba nada más que el privilegio de formar parte de algo más poderoso y misterioso. Pero las sociedades civilizadas modernas distan mucho de tener esta concepción del mundo. Desarrollamos el concepto de lo "justo". Existo, y por ende, sería injusto que el mundo no me asegure aquello que necesito para ser feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario